Acá en Viamonte sólo se habla de Bianchi, es el nombre que circula por todos los pasillos". Un viejo conocedor de las entrañas de la AFA describía el clima que se instaló en la casa del fútbol. El que está en boca de todos es Carlitos. A la cabeza va el Virrey y detrás, por ahora, Diego, Checho Batista y Russo. Es más, alguien que en estos días tuvo comunicación fluida con Zurich, donde está Julio Grondona por la reunión de Comité Ejecutivo de la FIFA, indicó que Don Julio podría pisar suelo argentino mañana por la mañana, 24 horas antes de lo previsto. Y no descarta una reunión para ese mismo día...
Ante este panorama, Bianchi, que sabe que no debe mostrarse desesperado pero que encuentra la manera de estar bien informado de cómo marcha la cuestión, le va dando retoques a su proyecto. No podría decirse que comienza a idearlo, porque un tipo como él, que en su intimidad siempre soñó con dirigir a la Selección, hace rato que tiene los lineamientos básicos definidos en caso de hacerse cargo del equipo nacional.
Y así, el hombre que dirigió por última vez el 8 de enero del 2006 (Atlético contra el Valencia, 0-0) sueña con el debut, el 11 de febrero contra Francia en Marsella ('o lo harán viajar a Escocia para el 19/11 si lo confirman rápido?).
Por eso, va proyectando un 11 titular, sin demasiados misterios en cuanto al dibujo, un 4-3-1-2, quizá con alguna sorpresa en los nombres. Por caso, y más allá de que es consciente de sus 33 años y sus problemitas físicos, Bianchi apuesta por la Brujita Verón, "de ocho", como les aclara a sus íntimos cuando se embala en charlas futboleras. Apuesta a un 9 de área, potente, y ahí anota a un Denis o un Diego Milito, sin descartar goleadores del fútbol local. Quiere saber cómo anda Clemente Rodríguez en el Spartak Moscú porque piensa en el Peladito como su lateral izquierdo. Y aspira a que su proyecto de reflotar a la Selección del fútbol local (idea que el Coco pudo sostener por menos de un semestre o que Bielsa lleva adelante en Chile) le permita consolidar a un lateral derecho.
Tiene certezas en Mascherano (y Gago como relevo cuando el partido pida más control de pelota), en Riquelme... 'Y Messi? Es fija. Pero el Virrey hablará con él, hablará mucho con él. 'Y Tevez? 'Y Agüero? Cuentan, pero no habrá bajitos al por mayor en el 11 titular. Además, el Pelado ya piensa en cuestiones organizativas, por eso intentará tener un estrecho contacto con los Juveniles, como en Boca, y pedirá contar con algún tipo de voz y voto en la elección de los amistosos.
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